Helado de Aceite de Oliva

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El aceite de oliva, también conocido como oro líquido, es uno de los protagonistas dentro de la dieta mediterránea debido a sus múltiples beneficios para la salud. Actualmente podemos comprar aceite de oliva de todas las variedades y adaptado a los bolsillos de cada uno; incluso existe el aceite de oliva gourmet, con sabores y texturas maravillosas. 

Ingredientes del Helado Casero de Aceite de Oliva

  • 250 mililitros de leche entera
  • 250 mililitros de nata para montar
  • 100 mililitros de aceite de oliva virgen extra
  • Edulcorante natural al gusto
  • 5 yemas

Preparación

  1. En un bol amplio separamos las yemas de las claras. Añadimos el edulcorante y batimos bien. 
  2. Cogemos una olla y echamos la leche junto con la nata. Calentamos a fuego medio. Lo apagaremos antes de que rompa a hervir. 
  3. Incorporamos la mezcla de yemas y edulcorante, poco a poco y mezclando bien con la ayuda de unas varillas. 
  4. Cuando esté bien mezclado todo, volvemos a encender el fuego. Cocinamos a fuego lento, sin dejar de remover y evitando que hierva. 
  5. Una vez tengamos una mezcla espesa y con cuerpo, retiramos y dejamos que repose mientras se enfría a temperatura ambiente. 
  6. Ya fría, vamos añadiendo el aceite de oliva virgen extra procurando que se integre totalmente. 
  7. Vertemos nuestro helado en un recipiente que se pueda cerrar herméticamente y lo metemos en el congelador. Dejamos dentro de este durante una hora antes de sacarlo y removerlo. 
  8. Repetimos cada media hora durante dos horas más. De este modo conseguiremos un helado cremoso y sin cristales de hielo. 
  9. Servimos. Podemos acompañarlo de un chorrito de miel o con un poco de chocolate negro. Le dará un toque aún más especial a este helado tan rico. Podemos decorar con pistachos

Algunos de los beneficios del aceite de oliva son: 

Ayuda a controlar el colesterol: El aceite de oliva es rico en ácido oleico, el cual está demostrado que ayuda a regular los niveles de colesterol malo (LDL), y aumentar el colesterol bueno (HDL). 

Permite mejorar la circulación: La dieta mediterránea está considerada una de las más saludables a nivel mundial, sobre todo por el uso del aceite de oliva. Este oro líquido, consumido en cantidades adecuadas, puede ayudar a reducir las probabilidades de sufrir problemas de circulación, sobre todo en brazos y piernas. 

Esto se debe a que los ácidos grasos presentes en este aceite permiten aumentar la vasodilatación de las arterias, mejorando notablemente la circulación de la sangre y reduciendo los niveles de presión arterial. 

Rico en vitaminas A, D, E, Y, K

La vitamina A permite mantener una salud en la piel, a prevenir infecciones causadas por bacterias o virus, y a mantener los huesos fuertes. 

Por su parte la vitamina D permite que nuestro cuerpo absorba y regule de forma correcta el calcio y el fósforo en sangre. 

La vitamina E, al igual que la A, ayuda a mantener a nuestro organismo protegido de virus. También tiene efecto antioxidante, permitiendo retrasar el envejecimiento celular prematuro. 

No menos importante, la vitamina K cuida de nuestros huesos y nos ayuda a regular la coagulación de la sangre. 

Ayuda a tonificar y a hidratar la piel

Gracias a sus altos niveles de vitamina E, el aceite de oliva se puede emplear como cosmético natural para mantener una piel suave y tonificada. 

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Helado de Aceite de Oliva

El aceite de oliva, también conocido como oro líquido, es uno de los protagonistas dentro de la dieta mediterránea debido a sus múltiples beneficios para la salud. Actualmente podemos comprar aceite de oliva de todas las variedades y adaptado a los bolsillos de cada uno; incluso existe el aceite de oliva gourmet, con sabores y texturas maravillosas. 

Tipo: Helado de Aceite de Oliva Ligero

Cocina: Helado de Aceite de Oliva Fitness

Palabras claves: Receta de Helado de Aceite de Oliva Saludable

Rendimiento de la receta: 4

Tiempo de preparación: PT5M

Tiempo de cocinado: PT15M

Tiempo total: PT20M

Ingredientes de la receta:

  • 250 mililitros de leche entera
  • 100 mililitros de aceite de oliva virgen extra
  • 250 mililitros de nata para montar
  • Edulcorante natural al gusto
  • 5 yemas

Instrucciones de la receta: En un bol amplio separamos las yemas de las claras. Añadimos el edulcorante y batimos bien. Cogemos una olla y echamos la leche junto con la nata. Calentamos a fuego medio. Lo apagaremos antes de que rompa a hervir. Incorporamos la mezcla de yemas y edulcorante, poco a poco y mezclando bien con la ayuda de unas varillas. Cuando esté bien mezclado todo, volvemos a encender el fuego. Cocinamos a fuego lento, sin dejar de remover y evitando que hierva. Una vez tengamos una mezcla espesa y con cuerpo, retiramos y dejamos que repose mientras se enfría a temperatura ambiente. Ya fría, vamos añadiendo el aceite de oliva virgen extra procurando que se integre totalmente. Vertemos nuestro helado en un recipiente que se pueda cerrar herméticamente y lo metemos en el congelador. Dejamos dentro de este durante una hora antes de sacarlo y removerlo. Repetimos cada media hora durante dos horas más. De este modo conseguiremos un helado cremoso y sin cristales de hielo. Servimos. Podemos acompañarlo de un chorrito de miel o con un poco de chocolate negro. Le dará un toque aún más especial a este helado tan rico.

Puntuación del editor:
5