Cocinar y almacenar alimentos para toda la semana es una práctica cada vez más popular conocida como ‘meal prep’, que puede ser muy viable y beneficiosa tanto para la salud como para el ahorro de tiempo y dinero. Sin embargo, para que sea efectiva y segura, se deben seguir ciertas recomendaciones y consejos centrados en la dieta equilibrada y la seguridad alimentaria.
La conservación adecuada de alimentos no solo es esencial para mantener la seguridad y calidad nutricional, sino también para promover prácticas alimentarias sostenibles. Los platos saludables, cuando se almacenan correctamente, pueden mantener su valor nutricional y sabor durante más tiempo.
¿Conservar en plástico es mejor que otros métodos?
No hay una respuesta definitiva a si es mejor conservar alimentos en plástico o en otros recipientes; depende de las necesidades individuales, las prioridades en cuanto a la salud y la sostenibilidad, y el uso específico previsto. Es crucial elegir envases de plástico hechos para uso alimentario y prestar atención a las recomendaciones del fabricante.
- Ligereza: Los recipientes de plástico son ligeros y fáciles de transportar, lo que los hace convenientes para el uso diario y para llevar alimentos fuera de casa.
- Versatilidad: Existen variedades de plástico diseñadas para resistir altas y bajas temperaturas, lo que las hace adecuadas para el almacenamiento en congeladores y para calentar alimentos en el microondas (siempre que estén etiquetados como seguros para tal uso).
- Hermeticidad: Muchos recipientes de plástico ofrecen un sellado hermético que puede ayudar a mantener la frescura de los alimentos por más tiempo.
Los Envases Laciana cumplen con todas las variables posibles para cubrir cualquier tipo de dieta y alimento cocinado y conservarlo todo el tiempo del Meal Prep.
Consejos de Seguridad Alimentaria con envases de plástico para comida
- Enfriamiento Adecuado: Deja que los alimentos cocinados se enfríen a temperatura ambiente antes de refrigerarlos para evitar la proliferación de bacterias.
- Almacenamiento Correcto: Asegúrate que el envase con tapa sea hermético. Preferentemente, utiliza recipientes de plástico libre de BPA.
- Evitar la Contaminación Cruzada: Almacena carnes, verduras y otros alimentos en secciones separadas del refrigerador para evitar la contaminación cruzada.
- Revisar Temperaturas: Asegúrate de que tu refrigerador esté a la temperatura adecuada, generalmente por debajo de 5°C (41°F) para prevenir el crecimiento bacteriano.
- Consumo Oportuno: Consume las comidas preparadas en un lapso de 3 a 5 días para asegurar su frescura y seguridad. Algunas comidas pueden congelarse para prolongar su vida útil. Los platos preparados para consumir en sexto y séptimo día, pueden congelarse el primer día de la semana, y descongelarse a partir del cuarto o quinto.
Viabilidad del ‘Meal Prep’
- Ahorro de Tiempo: Dedicar unas horas a cocinar en un día específico puede ahorrar mucho tiempo durante la semana.
- Control de Porciones: Preparar las comidas por adelantado ayuda a controlar las porciones y facilita el seguimiento de una dieta equilibrada.
- Reducción del Desperdicio: Planificar y preparar las comidas con anticipación ayuda a reducir el desperdicio de alimentos, ya que se compra y se cocina solo lo necesario
Ensaladas de Legumbres: Las ensaladas que incorporan legumbres como lentejas, garbanzos o frijoles son no solo nutritivas sino también resistentes al almacenamiento en frío. Estas preparaciones, ricas en proteínas y fibra, pueden conservarse en el refrigerador durante varios días sin perder sus propiedades.
Cazuelas Vegetarianas: Los guisos o cazuelas basados en vegetales, granos y especias pueden mantenerse en buen estado en el refrigerador por un tiempo prolongado. Platos como el curry de vegetales o el chili sin carne son ejemplos perfectos que mantienen su integridad y sabor incluso después de algunos días de conservación.
Sopas y Caldos a Base de Vegetales: Las sopas, especialmente aquellas ricas en vegetales, legumbres y granos integrales, son excelentes para la conservación. Una sopa de lentejas o un minestrone cargado de verduras pueden durar varios días en el refrigerador y suelen saborear mejor después de un día o dos, ya que los sabores tienen tiempo de integrarse.
Estofados de Vegetales: Al igual que las sopas, los estofados a base de ingredientes robustos como papas, zanahorias, y otros tubérculos pueden mantenerse bien en refrigeración. Un estofado marroquí de garbanzos y vegetales, por ejemplo, puede ser una opción nutritiva y reconfortante.
Cazuelas de Quinoa o Arroz Integral: Los platos que incluyen granos integrales como la quinoa o el arroz integral pueden conservarse durante varios días en el frigorífico. Puedes preparar una cazuela de quinoa con verduras asadas y un aderezo a base de hierbas para una comida completa.
Tortillas de Verduras o Frittatas: Las tortillas o frittatas cargadas de verduras son fáciles de preparar, nutritivas y se conservan bien en la nevera. Son ideales para consumir en cualquier momento del día, ya sea en desayunos, almuerzos o cenas.
Ensaladas de Granos: Las ensaladas hechas con granos como cebada, farro o bulgur, combinados con vegetales picados, hierbas frescas y un aderezo a base de aceite de oliva, pueden durar varios días refrigeradas. Solo asegúrate de añadir elementos más delicados como hojas verdes o tomates justo antes de servir.
Barras de Proteínas o Energéticas Caseras: Si bien no son un «plato» en el sentido tradicional, las barras de proteínas o energéticas caseras pueden ser un excelente snack o complemento para tus comidas. Utiliza ingredientes como nueces, semillas, avena y frutas secas para crear una barra nutritiva que se conservará bien durante la semana.
Curry de Vegetales: Los currys, especialmente aquellos a base de vegetales y legumbres, son ideales para la conservación. Un curry de lentejas rojas o un curry de garbanzos puede mantenerse en buen estado durante varios días en el refrigerador y son perfectos para calentar y servir en poco tiempo.
Consejos Prácticos para la Conservación
- Enfriamiento Rápido: Enfría los platos cocinados antes de colocarlos en el refrigerador para evitar el aumento de temperatura en su interior.
- Etiquetado: Etiqueta los envases con la fecha de almacenamiento para llevar un control de su duración y asegurar su consumo en un plazo adecuado.
- Rotación: Mantén un orden en el refrigerador que te permita consumir primero los alimentos con mayor tiempo de almacenado.