A pesar de que actualmente está muy de moda, la kombucha es una bebida probiótica bastante antigua caracterizada por los múltiples beneficios y propiedades que aporta a quien la consume. Es actualmente uno de los mejores aliados para combatir casi cualquier tipo de bacteria.
Ingredientes de la Kombucha Casera
- 1,6 litros de agua mineral a temperatura ambiente
- 120 gramos de azúcar blanco
- Scoby y kombucha madura
- 10 gramos de té verde o negro
Preparación
- Vertemos la mitad del agua mineral (800 ml) en la olla. Procedemos a calentarla. Mediante el uso de un termómetro vamos controlando la temperatura y, cuando llegue a 80ºC, apagamos el fuego.
- Añadimos el té negro o verde, el que más nos guste, y mezclamos bien con la ayuda de una varilla. Dejamos que el té infusione durante, al menos, 15 minutos.
- Colamos la mezcla para retirar los restos del té y, a continuación, y mediante un embudo, echamos el agua ya limpia en el envase que vayamos a usar como fermentador. Este deberá ser amplio.
- Incorporamos el azúcar y mezclamos todo hasta lograr que quede totalmente disuelto. A pesar de que parezca mucho azúcar, este será el alimento del scoby; es decir, nosotros no lo llegaremos a ingerir.
- Añadimos el resto del agua y dejamos que enfríe a temperatura ambiente. Antes de proceder a verter el scoby, es recomendable medir la temperatura ya que, si es muy alta, lo podemos matar. Esta no debe superar los 30ºC.
- Echamos el scoby junto con todo el líquido que lo acompaña. Con la ayuda de una tela o trapo y una goma elástica cubrimos la boca de nuestro fermentador.
- Dejamos nuestra mezcla fermentar entre 7 y 15 días a una temperatura entre 15 y 28ºC, nunca más ni menos. También procuraremos que la luz del sol no le dé directamente.
- Es posible ir probando nuestra kombucha cada día a partir del quinto día de fermentación. Una vez su sabor sea agridulce sabremos que está lista.
- Destapamos y podremos observar que se ha formado un nuevo scoby en la superficie. Lo retiramos y colocamos en otro recipiente junto con un poco menos de la mitad de la kombucha. Esto nos permitirá usarlo de nuevo para elaborar más kombucha casera.
- Vertemos la kombucha en botes de cristal que se puedan cerrar de manera hermética y las dejamos gasificar durante al menos 3 días a temperatura ambiente.
- Pasado ese tiempo, podremos disfrutar de una deliciosa kombucha hecha en la comodidad de nuestro hogar. Si no disponemos de los ingredientes o no nos queda a nuestro gusto, la posibilidad de comprar Kombucha online es ideal, pues durante el transporte, no se daña el producto final.
Es un buen probiótico: Proporciona una significativa cantidad de bacterias saludables al intestino, permitiendo que disfrutemos de mejores digestiones y veamos reducida la inflamación abdominal.
Antibacteriano: Durante la fermentación de la kombucha se produce el ácido acético, el cual tiene la capacidad de matar muchos microorganismos perjudiciales para nuestra salud. Este ácido también se encuentra en abundante cantidad en el vinagre.
Posee buen poder antioxidante: Se cree que la kombucha, sobre todo cuando se elabora con té verde, tiene poderes antioxidantes en el hígado. A pesar de que aún no existen estudios realizados sobre humanos, se tiene la esperanza de que en un futuro próximo se demuestre los beneficiosos efectos de esta bebida sobre la salud hepática.