La fiebre de trabajar desde casa provocó un sinfín de pedidos de comida a domicilio. Horarios interminables, comidas saltadas, y dietas estropeadas por completo, al menos en el caso de los autónomos, en los que debo incluirme. Sin embargo este tipo de nuevos modos de vida nos hace pensar cómo podemos optimizarlo. Cómo podemos incluir en una dieta medianamente saludable, los nutrientes esenciales o en este caso, evitar abusar de los carbohidratos.
¿Qué consideramos como carbohidratos?
Un menú bajo en carbohidratos debe evitar por completo incluir estos ingredientes:
- Patatas. Muchos menús a domicilio rellenan el precio incluyendo patatas, o bien fritas o bien de otra preparación. Si buscamos algo bajo en carbohidratos, deben estar completamente prohibidas. Por suerte, es relativamente sencillo omitir las patatas al pedir comida. Si organizamos menús semanales a domicilio las compras serán más fluidas en este aspecto.
- Avena. Algunos menús, especialmente desayunos, pueden contener trazas de avena, o directamente utilizarlo como ingrediente principal.
- Cualquier tipo de pasta. Por desgracia para los restaurantes italianos, cualquier menú que incluya pastas o masas, incluyendo la pizza en este caso, es rica en carbohidratos. Tendremos que prescindir de estos restaurantes y platos.
- Arroz. El arroz es un ingrediente clave en muchos menús, especialmente de tipología oriental. Por desgracia debemos prescindir de ellos, incluyendo platos como el Ku-Bak, aunque sea inflado.
- Panes y Harinas. Y como en la pasta, cualquier derivado de panes y harinas quedaría completamente excluido por obvia razones.
- Leche. Esto puede ser una sorpresa para muchos, pero la leche es rica en carbohidratos. Por suerte, a la hora de organizar un menú, pocas cosas salvo el desayuno puede incluir leche.
- Legumbres. A pesar de que las legumbres sean de mis favoritas, y sean altamente saludables, debemos prescindir de ellas si queremos evitar los carbohidratos.
¿Qué debe incluir un menú bajo en Carbohidratos?
Carnes
La gran mayoría de carnes son aptas para esta dieta, especialmente las recetas con pollo o ternera. Se tratan de proteínas completas y de calidad, además de contener altas cantidades de B12. Con una preparación «limpia» y sencilla, evitaremos carbohidratos aprovechando todos los beneficios de la carne.
Pescados y Mariscos
Al igual que con las carnes, los beneficios del pescado son similares, incluyendo en este caso otras vitaminas y el Omega 3. Sus proteínas son limpias aunque menos intensas, y con una preparación sencilla evitaremos esta carga de carbohidratos.
Huevos
Y de proteína en proteína pasamos. Los huevos además de ser un ingrediente muy barato y sencillo de preparar, siempre nos da mucho juego a la hora de cocinar. Nulo en carbohidratos (dependiendo de la preparación), y rico en diferentes nutrientes. Obviamente en un menú diario no debemos incluir estos tres seguidos, sino organizarlos a nivel semanal, o de dos semanales.
Frutas de baja fructosa
Aquí entramos en terreno pantanoso, ya que hay frutas más ricas en carbohidratos que otras. Debemos tener claro cuáles son recomendadas y cuáles no, si queremos medir y prescindir de los carbohidratos dependiendo de nuestra dieta. Debes LLENAR tu nevera de estas frutas:
- Frambuesas
- Moras
- Fresas
- Arándanos
- Clementinas
- Kiwi
- Melón cantalupo
- Limón
- Lima
- Olivas
- Aguacate
- Sandía
