La campana extractora es uno de los electrodomésticos más importantes en la cocina, ya que se encarga de absorber el humo, la grasa y los olores que se generan al cocinar. Sin embargo, con el tiempo, la acumulación de grasa y suciedad en los filtros y en la estructura de la campana puede afectar su rendimiento y convertirse en un problema de higiene.
Mantener la campana extractora limpia no solo mejora su eficiencia, sino que también ayuda a evitar malos olores, prolonga su vida útil y reduce el riesgo de incendios provocados por la acumulación de grasa.
Pero, ¿cada cuánto tiempo se debe limpiar? La frecuencia de limpieza dependerá del uso que se le dé. Si cocinas a diario, lo ideal es hacer una limpieza ligera cada semana y una limpieza profunda al menos una vez al mes. Si la usas con menor frecuencia, una limpieza completa cada dos o tres meses puede ser suficiente.
Materiales y Productos Necesarios
Antes de comenzar con la limpieza de las campanas extractoras, es importante reunir todos los materiales y productos que facilitarán la tarea. Dependiendo del nivel de suciedad y del tipo de campana, puedes optar por productos comerciales o soluciones caseras más ecológicas.
Productos de limpieza recomendados:
✅ Desengrasante industrial: Ideal para eliminar acumulaciones gruesas de grasa.
✅ Vinagre blanco: Un limpiador natural con propiedades desinfectantes y desengrasantes.
✅ Bicarbonato de sodio: Excelente para descomponer grasa adherida y eliminar olores.
✅ Jabón neutro o lavavajillas: Para una limpieza más suave, especialmente en campanas de acero inoxidable.
✅ Alcohol de limpieza: Perfecto para dar un acabado brillante y eliminar residuos grasos.
Herramientas necesarias:
🔹 Esponja o estropajo suave: Para frotar sin dañar la superficie.
🔹 Paños de microfibra: Absorben bien la grasa y no dejan pelusas.
🔹 Cepillo de dientes viejo o brocha: Para limpiar rincones difíciles.
🔹 Destornillador (opcional): Si necesitas desmontar alguna pieza de la campana.
🔹 Cubo con agua caliente: Ayuda a disolver la grasa más rápido.
Alternativas ecológicas y caseras:
Si prefieres evitar productos químicos agresivos, puedes utilizar vinagre con bicarbonato de sodio, una mezcla efectiva y natural. También puedes usar limón, que tiene propiedades desengrasantes y deja un aroma fresco en la cocina.
Con estos materiales listos, el proceso de limpieza será más sencillo y eficiente. Ahora pasemos al siguiente paso: preparar la campana para su limpieza.
Preparación antes de la limpieza
Antes de comenzar a limpiar la campana extractora, es fundamental preparar correctamente el área para evitar accidentes y facilitar el proceso.
1. Desconectar la campana extractora
Para garantizar seguridad durante la limpieza, lo primero que debes hacer es apagar la campana y desconectarla de la corriente eléctrica. Esto evita cualquier riesgo de cortocircuito si se utilizan productos líquidos o húmedos en la limpieza.
2. Cubrir la zona de trabajo
La limpieza de la campana puede generar salpicaduras de grasa o residuos en la encimera y en los fogones. Para evitar ensuciar más de lo necesario:
- Coloca periódicos o papel absorbente sobre la cocina.
- Usa un trapo o paño viejo debajo de la campana para recoger la grasa que pueda gotear.
3. Retirar los filtros
Los filtros son la parte que más acumula grasa y suciedad, por lo que se deben desmontar para limpiarlos por separado.
- La mayoría de los modelos tienen filtros metálicos que se pueden extraer fácilmente presionando una pestaña o deslizando un seguro.
- Si tu campana usa filtros de carbón, estos no se pueden limpiar y deben ser reemplazados cada cierto tiempo.
4. Identificar las partes desmontables
Algunas campanas permiten desmontar partes como la carcasa o el panel de control. Si es necesario hacerlo para una limpieza más profunda:
- Usa un destornillador si hay tornillos visibles.
- Toma fotos antes de desmontar para recordar cómo volver a colocar las piezas correctamente.
Una vez que la campana está lista, podemos pasar a la parte más importante: la limpieza de los filtros, donde se acumula la mayor cantidad de grasa.
Limpieza de los filtros de la Campana Extractora
Los filtros son la parte de la campana extractora que más grasa y suciedad acumulan, por lo que su limpieza es fundamental para que el electrodoméstico funcione correctamente. Dependiendo del tipo de filtro, el proceso de limpieza puede variar.
1. Identificar el tipo de filtro
Las campanas extractoras pueden tener dos tipos principales de filtros:
- Filtros metálicos (aluminio o acero inoxidable): Son reutilizables y se pueden limpiar fácilmente con agua y desengrasante.
- Filtros de carbón activado: Se utilizan en campanas sin salida de humos y no se pueden lavar. Deben reemplazarse cada 3 a 6 meses, dependiendo del uso.
2. Limpieza de los filtros metálicos
Para eliminar la grasa acumulada en los filtros metálicos, sigue estos pasos:
🔹 Método 1: Con agua caliente y desengrasante
- Llena un recipiente grande o el fregadero con agua caliente y añade un buen chorro de detergente desengrasante o lavavajillas.
- Introduce los filtros y déjalos en remojo durante 15 a 30 minutos.
- Frota con un cepillo de cerdas duras o una esponja para eliminar la grasa incrustada.
- Enjuaga bien con agua caliente y deja secar completamente antes de volver a colocarlos.
🔹 Método 2: Con vinagre y bicarbonato de sodio (opción natural)
- Hierve agua en una olla grande.
- Añade 1 taza de vinagre blanco y 2 cucharadas de bicarbonato de sodio (hazlo poco a poco, ya que la mezcla burbujeará).
- Introduce los filtros y deja actuar durante 10-15 minutos.
- Retira los filtros con cuidado y frótalos con un cepillo o esponja.
- Enjuaga con agua caliente y seca bien antes de reinstalarlos.
🔹 Método 3: En el lavavajillas (si es apto para ello)
Si los filtros son de acero inoxidable y el fabricante lo permite, puedes lavarlos en el lavavajillas con un programa de alta temperatura. Sin embargo, esto puede no ser suficiente para eliminar la grasa más pegajosa.
3. Reemplazo de filtros de carbón
Si tu campana usa filtros de carbón activado, estos no se pueden limpiar. Debes revisarlos cada 3-6 meses y cambiarlos cuando notes que la campana pierde potencia de absorción o empieza a desprender malos olores.
Una vez que los filtros estén completamente limpios y secos, puedes dejarlos a un lado y proceder con la limpieza del interior de la campana extractora.
Limpieza del interior de la campana extractora
Además de los filtros, el interior de la campana extractora acumula una gran cantidad de grasa y residuos con el tiempo. Es importante limpiarlo bien para evitar la acumulación de suciedad que pueda afectar su funcionamiento y generar malos olores.
1. Retirar la grasa adherida en las paredes internas
Para limpiar el interior de la campana, sigue estos pasos:
- Rocía un desengrasante en las superficies internas de la campana. Si prefieres un método natural, puedes mezclar agua caliente con vinagre blanco en un pulverizador.
- Deja actuar el producto unos minutos para que la grasa se desprenda más fácilmente.
- Frota con una esponja o paño húmedo para retirar la suciedad. Usa un cepillo de dientes viejo para limpiar las esquinas y áreas de difícil acceso.
- Si la grasa está muy incrustada, humedece un paño con agua caliente y bicarbonato de sodio, y pásalo sobre las zonas afectadas.
2. Limpieza del motor y las aspas (con precaución)
El motor de la campana extractora no debe mojarse directamente, pero es recomendable limpiar sus alrededores para evitar acumulaciones de grasa.
- Usa un paño seco o ligeramente húmedo con desengrasante para limpiar las aspas del ventilador.
- Si el ventilador tiene grasa endurecida, puedes usar alcohol de limpieza para descomponer la suciedad sin dañar los componentes eléctricos.
- Evita rociar directamente líquidos sobre los cables y el motor.
3. Eliminar malos olores del interior
Si notas que la campana tiene un olor desagradable incluso después de limpiarla, puedes:
- Colocar un recipiente con bicarbonato de sodio dentro de la campana durante unas horas para absorber olores.
- Hervir agua con cáscaras de limón o naranja y dejar que el vapor ayude a neutralizar el olor en la cocina.
Con el interior limpio, el siguiente paso es dejar la campana impecable por fuera.
Limpieza del exterior de la campana extractora
El exterior de la campana extractora es la parte más visible y propensa a ensuciarse con salpicaduras de grasa, polvo y restos de comida. Mantenerlo limpio no solo mejora la apariencia de la cocina, sino que también evita que la suciedad se acumule con el tiempo.
1. Elegir el producto adecuado según el material
Dependiendo del material de tu campana, debes usar productos específicos:
- Acero inoxidable: Usa un limpiador específico para acero o una mezcla de agua con unas gotas de vinagre para evitar manchas.
- Vidrio: Limpia con un paño de microfibra y limpiacristales para dejar un acabado sin marcas.
- Plástico o pintado: Usa un jabón neutro con agua tibia para evitar daños en la superficie.
2. Método de limpieza paso a paso
- Aplica el producto limpiador con un paño de microfibra o una esponja suave.
- Frota en la dirección del material (especialmente en acero inoxidable, para evitar rayones).
- Si hay grasa pegada, deja actuar el desengrasante unos minutos antes de frotar.
- Seca con un paño limpio y seco para evitar marcas de agua o residuos.
3. Trucos para un acabado brillante
Para dejar la campana impecable y sin huellas:
- Pasa un paño con unas gotas de aceite de oliva sobre el acero inoxidable para dar brillo.
- Usa alcohol de limpieza en un paño seco para eliminar huellas dactilares.
Con la campana completamente limpia, solo queda el último paso: el secado y montaje de los filtros.
Limpieza del exterior de la campana extractora
El exterior de la campana extractora es la parte más visible y propensa a ensuciarse con salpicaduras de grasa, polvo y restos de comida. Mantenerlo limpio no solo mejora la apariencia de la cocina, sino que también evita que la suciedad se acumule con el tiempo.
1. Elegir el producto adecuado según el material
Dependiendo del material de tu campana, debes usar productos específicos:
- Acero inoxidable: Usa un limpiador específico para acero o una mezcla de agua con unas gotas de vinagre para evitar manchas.
- Vidrio: Limpia con un paño de microfibra y limpiacristales para dejar un acabado sin marcas.
- Plástico o pintado: Usa un jabón neutro con agua tibia para evitar daños en la superficie.
2. Método de limpieza paso a paso
- Aplica el producto limpiador con un paño de microfibra o una esponja suave.
- Frota en la dirección del material (especialmente en acero inoxidable, para evitar rayones).
- Si hay grasa pegada, deja actuar el desengrasante unos minutos antes de frotar.
- Seca con un paño limpio y seco para evitar marcas de agua o residuos.
3. Trucos para un acabado brillante
Para dejar la campana impecable y sin huellas:
- Pasa un paño con unas gotas de aceite de oliva sobre el acero inoxidable para dar brillo.
- Usa alcohol de limpieza en un paño seco para eliminar huellas dactilares.
Con la campana completamente limpia, solo queda el último paso: el secado y montaje de los filtros.