Los bombones caseros son una opción deliciosa y personalizable para disfrutar como postre o para regalar en ocasiones especiales, como la Navidad. Son fáciles de preparar y permiten experimentar con diferentes combinaciones de rellenos. Esta receta utiliza chocolate de alta calidad y una mezcla de frutos secos y semillas para un toque crujiente y nutritivo.
Ingredientes de los bombones sin azúcar
Similares a las frutas de aragón, pero con una base de fruto seco.
- 300 g de chocolate negro o con leche (según preferencia)
- 1/2 taza de avellanas tostadas, picadas
- 1/2 taza de almendras, picadas
- 1/4 de taza de nueces, picadas
- 1/4 de taza de pasas o arándanos deshidratados
- Moldes para bombones o mini cápsulas de papel
- 1 cucharadita de esencia de vainilla o ralladura de naranja para aromatizar
Un error común es quemar el chocolate durante el derretido. Nosotros usamos un baño María, asegurándonos de que el agua no toque el recipiente donde está el chocolate. Si preferimos el microondas, lo hacemos en intervalos cortos de 20 segundos, removiendo cada vez.
Al igual que en una pastelería online, el proceso principal viene de la mano con un buen molde. Asegúrate de que estén perfectamente secos antes de verter el chocolate. Si son moldes de silicona, no necesitan engrasarse.
Preparación
- Preparar el Chocolate:
- Troceamos el chocolate y lo derretimos al baño María o en el microondas en intervalos cortos de 20 segundos, removiendo cada vez para evitar que se queme.
- Una vez derretido, podemos añadir la esencia de vainilla o la ralladura de naranja para aromatizar, mezclando bien.
- Preparar los Moldes:
- Si utilizamos moldes para bombones, nos aseguramos de que estén limpios y secos.
- Vertemos una pequeña cantidad de chocolate derretido en cada molde, asegurándonos de cubrir el fondo y las paredes. Reservamos una parte del chocolate derretido para cerrar los bombones después.
- Añadir el Relleno:
- En cada molde, colocamos una mezcla de frutos secos picados y pasas o arándanos deshidratados, dejando un pequeño espacio para el chocolate de cierre.
- Cubrir y Sellar:
- Vertemos más chocolate derretido sobre los frutos secos para cubrir completamente el relleno. Alisamos la superficie con una espátula o el dorso de una cuchara.
- Refrigerar:
- Colocamos los moldes en el refrigerador durante al menos 1 hora o hasta que los bombones estén completamente firmes.
- Desmoldar y Servir:
- Una vez firmes, desmoldamos los bombones con cuidado y los colocamos en mini cápsulas de papel o los presentamos directamente en un plato elegante.
El chocolate negro es rico en antioxidantes y aporta un toque amargo que combina perfectamente con la dulzura natural de los frutos secos y deshidratados. Los frutos secos son una fuente de grasas saludables, proteínas y fibra, haciendo de estos bombones un postre más nutritivo.
Estos bombones caseros son perfectos para regalar en cajas decorativas o como un detalle especial en una cena festiva. La receta es versátil y permite incorporar otros ingredientes como coco rallado, semillas o incluso un toque de licor para adultos.
¿Bombones poco apetecibles? Te guiamos
Si deseamos que los bombones tengan un acabado brillante y profesional, podemos templar el chocolate. Esto se logra enfriando el chocolate derretido en una superficie fría, como mármol, y volviéndolo a calentar ligeramente. Es un proceso opcional pero mejora mucho la presentación.
Estimación de Macronutrientes (por bombón, considerando 20 bombones):
- Chocolate (300 g): Aproximadamente 1500 kcal, 15 g de proteínas, 90 g de grasas, 150 g de carbohidratos.
- Frutos Secos (1 1/2 taza): Aproximadamente 900 kcal, 30 g de proteínas, 75 g de grasas, 30 g de carbohidratos.
- Pasas o Arándanos (1/4 taza): Aproximadamente 120 kcal, 1 g de proteínas, 0 g de grasas, 32 g de carbohidratos.
Totales Estimados (por bombón):
- Calorías: 126 kcal
- Proteínas: 2.3 g
- Carbohidratos: 9.1 g
- Grasas: 6.8 g
Estas cifras son aproximadas y pueden variar según los tamaños exactos y los ingredientes específicos utilizados.
Otros consejos que te serán útiles
Preparar los Moldes: Un error habitual es no preparar adecuadamente los moldes, lo que puede dificultar el desmoldado. Nos aseguramos de que estén perfectamente secos antes de verter el chocolate. Si son moldes de silicona, no necesitan engrasarse.
Usar Chocolate de Calidad: El éxito de los bombones depende en gran medida de la calidad del chocolate utilizado. Evitamos chocolates con demasiados azúcares añadidos o grasas vegetales. Un chocolate con un 70% de cacao o más ofrece un sabor intenso y una textura más adecuada para bombones.
Controlar la Cantidad de Relleno: Si colocamos demasiado relleno, no habrá suficiente espacio para sellar los bombones correctamente. Dejamos siempre un pequeño margen para cubrir los frutos secos con chocolate sin que se desborde.
Evitar que el Chocolate Se Endurezca Demasiado Rápido: Trabajamos rápidamente con el chocolate derretido para evitar que se enfríe antes de terminar de rellenar y sellar los moldes. Si esto sucede, podemos calentarlo nuevamente a baja temperatura para recuperar la fluidez.
Refrigerar el Tiempo Justo: Un error común es dejar los bombones demasiado tiempo en el refrigerador, lo que puede provocar que absorban olores de otros alimentos. Cubrimos los moldes con papel film y los dejamos solo hasta que estén firmes (aproximadamente 1 hora).
Desmoldar con Cuidado: Al desmoldar los bombones, aplicamos una presión suave pero firme para evitar que se rompan. Si están pegados, podemos refrigerarlos unos minutos más para que se endurezcan completamente antes de intentarlo de nuevo.
Decorar los Bombones: Si queremos decorar los bombones con líneas de chocolate blanco o cacao en polvo, lo hacemos una vez desmoldados. Un error es decorar mientras están aún en los moldes, ya que esto puede ensuciar el diseño final.
Almacenamiento: Los bombones deben almacenarse en un lugar fresco y seco, lejos de fuentes de calor y humedad. Evitamos guardarlos en el refrigerador, ya que la humedad puede opacar el chocolate y afectar su textura.
Variar el Relleno: Un error frecuente es no experimentar con diferentes rellenos. Podemos añadir un toque de sal marina para realzar el sabor, probar con frutos secos tostados para más aroma, o incorporar trocitos de frutas deshidratadas para un contraste interesante.