La leche de avena es una leche vegetal de las más populares que hay. Es una de las bebidas más saciantes y beneficiosas que hay para la flora intestinal. Además, una propiedad destacable de esta bebida es que es una bebida que ayuda a bajar el nivel de colesterol.
La avena es uno de los cereales más equilibrados y completos si hablamos a nivel nutricional. Eso es por su gran aporte de hidratos de carbono, grasas y proteínas.
Esta bebida vegetal es la ideal si eres una persona intolerante a la lactosa o si estás buscando alguna alternativa a la leche de vaca tradicional. Adicionalmente, esta receta, es mucho más sana que las que venden en los mercados de consumibles, ya que está se ha elaborado solo con ingredientes naturales.
Ingredientes de la Leche de Avena Fit
- Copos de avena
- Sirope de arce
- Extracto de vainilla
- 1 litro de agua
- Dátiles
- Sal
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La receta de leche de avena casera que vamos a hacer incluye dátiles y vainilla, por lo que tendrá un sabor aún más impresionante. Puedes beberla fría o caliente y la puedes usar en numerosos platos, tanto dulces como salados. Se elabora en muy poquito tiempo, unos quince minutos aproximadamente. Cómo verás no necesitarás muchos ingredientes para preparar la leche de avena de esta receta.
La pulpa de los copos de avena resultante la podemos aprovechar de muchísimas formas. En secarla podríamos usarla como harina de avena para cocinar galletas o pastas sanas y saludables. Así podremos disfrutar de la leche de avena casera con unas pastas hechas de forma casera también.
Preparación
- Pon los copos de avena en un recipiente con agua durante, como mínimo, treinta minutos.
- Cuela los copos de avena y lávala con agua abundante.
- Pon toda la avena en un vaso y añade el resto de ingredientes. No nos tenemos que preocupar si nos quedamos cortos con el sirope de arce, el extracto de vainilla o la sal. En caso de que eso ocurra luego ajustaremos. Añadimos un litro de agua potable.
- Con la ayuda de una batidora de mano batiremos durante unos dos minutos toda la mezcla. Dejaremos reposar durante una hora.
- Una vez pasada la hora procederemos a colar la leche de avena con una tela o con un colador muy fino. Eso lo haremos con el fin de separar el líquido de los restos de los copos de avena. Es importante que no queden trocitos en la mezcla final. Podemos colar varias veces la mezcla para asegurarnos, aunque con una vez bien hecha debería bastar.
- En caso de que nos haya quedado una textura que no nos guste podemos añadir fácilmente más agua y reajustar el resto de ingredientes al gusto personal.
- Finalmente, esta lista para servir. Opcionalmente podemos añadir edulcorante natural y cacao en polvo, aunque cualquier forma de servir es perfecta.
Uno vez lista la leche de avena la podemos tomar ton lo que queramos. Se bebe con todo. Podemos beberla sola, endulzada, con cacao desgrasado o incluso con un café o té. Es una bebida que podremos disfrutar tanto en frio como en caliente ya que es deliciosa en ambos casos. En caso de que deseemos sustituir la leche de vaca es el sustituto perfecto.
